Hace un par de semanas, el menú situado en la pizarra colocada a pie de calle junto al puente Adaja ofrecía ‘bacalao grande y libre de cebolla’, ‘revolconas amargadas 36’ o ‘huevos rotos fusilados’.
El tono ya había bajado respecto a los ‘huevos rotos al caudillo’, ‘callos al rojo vivo’ o los ‘chorizos rojos’ de fechas anteriores, cuando incluso se podía leer ‘se regalan hostias’.
La aparición del llamativo menú en numerosos medios de comunicación, y la petición de IU al Ayuntamiento para retirarle la licencia de terraza, ha provocado que el bar haya modificado los platos y ya no pueda ser acusado de incumplir la Ley de Memoria Histórica.
Chuletón, bacalao, gambas, morcilla, chorizos coloraos, tortilla, chuletillas y huevos rotos son los platos que se ofrecen ahora. O sea, ni se asegura que la tortilla sea española, ni que el bacalao sea grande y libre de cebolla.
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