Adiós al sueño del ascenso. Unionistas cayó con claridad ante el Olimpic en la vuelta por 5-0 y finaliza su temporada en la segunda ronda del playoff. Los charros fueron superados por el rival, que mostró hechuras de categoría superior, y volteó la eliminatoria en apenas doce minutos.
El inicio del Olimpic mandó a la lona a Unionistas. En el minuto ocho, el primer desajuste defensivo lo aprovechó Cosme para pisar línea de fondo, centrar atrás y encontrar a Manu Fuster. El tiro golpeó en un defensor de Unionistas pero acabó dentro de la meta de Javi Díaz.
Sin tiempo para reaccionar ante el primer golpe, llegó el segundo. Más duro. Barba pierde un balón en campo rival por jugar en horizontal y el Olimpic rápidamente busca la espalda de la defensa. Solano, en el mano a mano, superó a Javi Díaz. Tuvo fortuna, puesto que el balón golpeó en el palo pero, en vez de salir escupido hacia fuera, cruzó de lado a lado para acabar superando la línea de gol.
En doce minutos, el Olimpic había dado la vuelta a la eliminatoria. Le costó rehacerse a Unionistas pero el paso de los minutos le asentó en el duelo. En ocasiones, demasiado directo hacia Óskar y Mitogo. El primer disparo charro lo tuvo el ecuatoguineano. Pero Paco no tuvo problemas en atajarlo.
Javi Díaz también evitó el tercero. Primero, en una falta en la frontal lanzada por Solano; después, en el descuento, en una disputa ante Cosme. Unionistas ya llegaba con asiduidad al campo rival, pero apenas un cabezazo de Mitogo a las manos de Paco y un disparo de Óskar, desviado, fueron los avisos charros.
La afición blanquinegra, por su parte, nunca se desanimó. Trató de sostener a los suyos en los peores minutos y les insufló el aire necesario para devolverles a la verticalidad. Al descanso, los locales vencían por 2-0.
Nada más iniciarse la segunda mitad, Antonio León tuvo que retirarse lesionado. Entró en su lugar Álex, que se colocó en el medio junto a Peli. Y Unionistas comenzó a llegar.
Óskar, Obispo y Barba trataron de meter el tanto que volviese a poner por delante en la eliminatoria. Pero en una contra, Cosme mandó un latigazo soberbio al fondo de las mallas. Golpetazo en la cara de Unionistas.
Astu buscó el imposible y dejó línea de tres. Metió a Juan Fraile y Zubi y retiró a Barba y Sito. Con todo perdido, solo un imposible podía meter a Unionistas en el choque.
Pero no lo hubo. El Olimpic fue mejor. Mucho mejor. Y supo desenvolverse bien en el escenario. Jandro, después de estrellarse dos veces contra la madera, anotó el cuarto en el mano a mano ante Javi. También hizo lo propio Solano, para marcar el quinto del choque y matar una eliminatoria ya de por sí muerta.
La grada charra no cejó de animar. Ni siquiera acabado el partido. Cuando el sueño del ascenso ya se había marchado al limbo. Premió a los suyos con una sonora ovación para despedir un gran año. El del debut. El del primer playoff.
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