La Policía Local de Salamanca ha desplegado durante todo este jueves, con motivo de la celebración de la Nochevieja Universitaria, un amplio operativo de seguridad, y vigilancia en la ciudad, que incide especialmente en la Vaguada de la Palma y la Plaza Mayor, los dos lugares en los que se desarrollan los eventos más importantes de esta celebración.
Prácticamente en todos los accesos a estos dos recintos se realizan controles intensivos de seguridad, con el fin de detectar cualquier objeto peligroso. Además, en cuanto al tráfico rodado, en el interior y el entorno de la primera vía de ronda se efectúan controles preventivos de alcoholemia y drogas a los conductores.
Por lo tanto, en todos los accesos a la Vaguada de la Palma y la Plaza Mayor y en sus corredores peatonales, se llevan a cabo las inspecciones policiales precisas para evitar la introducción de todo tipo de objetos susceptibles de ser utilizados contra las personas o los bienes. Tampoco pueden introducirse envases de vidrio, botellas y elementos similares, manteniéndose vigente la prohibición de beber alcohol en la vía pública.
La Policía Local ha reforzado la vigilancia para proteger la seguridad pública y evitar, al mismo tiempo, el consumo indiscriminado de alcohol. Como en años anteriores, se trata de garantizar que un acto multitudinario como la celebración anticipada del año viejo transcurra en un ambiente festivo pero con las máximas garantías de tranquilidad, los mínimos riesgos y sin incidentes.
Accesos en la Plaza Mayor
Todas las medidas preventivas y de seguridad rigen también para los controles de entrada a la Plaza Mayor, que son efectivos desde las 18:00 horas, permaneciendo abiertos al tránsito de personas todos sus accesos peatonales tras los preceptivos registros individuales.
Al igual que el año pasado, se han habilitado las correspondientes salidas de emergencia y evacuación, debidamente señalizadas sobre los arcos, con cartelones de dos metros de ancho por uno de alto con la indicación ?exit-salida?. A la Plaza Mayor puede acceder un máximo de 22.000 personas, aunque los agentes pueden interrumpir en cualquier momento la entrada al recinto por razones de seguridad aunque no se hubiera completado ese número máximo establecido, o por cualquier otro motivo que pusiera en peligro la integridad de las personas y los bienes.
La Policía Local controla directamente, por tanto, todos los espacios de accesos a la Plaza Mayor y su entorno, estableciendo un dispositivo especial a tal efecto. Los controles se ubican en todas las entradas y en sus inmediaciones, y en ellos participan las Unidades Caninas, integradas por perros adiestrados a cargo de sus respectivos guías policiales.
Además, un grupo de agentes locales se sitúa en las balconadas del ágora para obtener en todo momento una visión global y precisa del número de participantes en el evento y evitar posibles avalanchas y riesgos similares.
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