Hablar con la dirección deportiva del nuevo Salamanca es hacerlo de resignación. Desde el día que entraron en escena no han dejado de trabajar y el Salamanca tenía formada prácticamente una plantilla muy competitiva para la categoría.

Ahora, los Javier de la Cruz, Líbero Parri y Miguel Ángel Merino disminuyen so volumen de trabajo hasta que llegue una solución. Las palabras de Hidalgo, siendo el que insufla ánimos a los demás, y el buen comportamiento de los jugadores con el club mantienen la ilusión de tres personas que estarán en guardia.

En guardia porque si el club termina saliendo adelante, la RFEF deberá dar una fechas extraordinarias a la entidad para formalizar contratos, licencias y, por tanto, fichar. Ahí volverán a entrar a escena, aunque como ellos reconocen, cuanto antes mejor.

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