El Consejo de Ministros aprobó el pasado 20 de junio varios anteproyectos de ley para configurar la nueva reforma fiscal. Pero, ¿cómo afectará a los planes de pensiones? La eliminación de la deducción de 1.500 euros en los dividendos y la reducción en la deducción por aportaciones a planes de pensiones supondrá que un 3% de los contribuyentes, algo más de 600.000, pagará de media 310 euros más a Hacienda. Para los restantes 5,7 millones de contribuyentes (casi el 30%), la reforma tendrá un efecto neutro.

Por ejemplo, según explica el Consejo General de Economistas, un contribuyente con 60 años de edad que tiene una base liquidable general compuesta por rendimientos del trabajo y de actividades económicas mayor de 40.000 euros, y ya ha aportado en 2014 a su Plan de Pensiones 5.000 euros, tiene dos opciones: agotar el límite de aportación en 2014 o destinar ese importe a agotarlo en 2015.

En 2015 los límites en las aportaciones a estos sistemas de previsión social se reducen al 30% de la suma de rendimientos netos del trabajo y de actividades económicas, desapareciendo el límite relativo incrementado del 50% vigente ahora para mayores de 50 años, y el límite absoluto será, en todo caso, de solo 8.000 euros, salvo que se modifique en la tramitación parlamentaria.

Cabe recordar que el patrimonio medio de los españoles en Planes de Pensiones individuales se situó el año pasado en 7.371 euros, un 13% más que en 2012, donde se alcanzaron los 6.520 euros, según los datos recogidos por el Observatorio Inverco. En Castilla y León creció también un 13%, hasta rondar los 8.100 euros. País Vasco destaca como la región con la cifra más alta de patrimonio medio por partícipe en Planes de Pensiones, con 18.652 euros, seguida de Navarra y La Rioja, con 10.855 euros y 10.644 euros, respectivamente.

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