El Grupo Municipal de Izquierda Unida-En Común en el Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo planteará una moción en el próximo Pleno, que se celebra el 24 de marzo, relativa a mejoras en la atención sanitaria.
Así, exige instar de nuevo a las autoridades sanitarias (Gerencia de Atención Primaria, Gerencia de Área y Consejería de Sanidad) a que hagan efectivas las sustituciones para vacaciones y permisos remunerados en todos los casos en los que haya profesionales disponibles en la bolsa de trabajo.
Solicitan a la Consejería de Sanidad, de igual modo, “un compromiso expreso para disminuir las listas de espera en atención primaria, estableciendo unos mínimos de obligado cumplimiento, en función de la actuación específica, que no deberán ser superados en ningún caso, siempre que existan recursos humanos disponibles en situación de paro”.
IU quiere, además, que el Ayuntamiento mirobrigense inste a poner en marcha políticas mediante las cuales se pueda recuperar a los profesionales formados en Castilla y León, “a los que esta administración forzó a emigrar, mediante la oferta de condiciones laborales dignas y contratos continuados que permitan superar este déficit de médicos haciendo de nuestra comunidad un destino atractivo para trabajar en unas condiciones óptimas”.
Finalmente, reclama que el Pleno del Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo solicite también a la Junta de Castilla y León la mejora de los servicios sanitarios en el municipio, “haciendo especial hincapié en la necesidad de incorporar la pediatría de urgencias, los monitoreos para embarazos y cubrir las plazas de enfermería asociados a la pediatría en el centro de especialidades”.
A juicio de IU, la sanidad pública “viene sufriendo un lento pero progresivo deterioro en los últimos tiempos”. Ese deterioro, subraya, “se hace más palpable en las zonas rurales por lo que se hace necesario abordar los problemas existentes y encontrar con la mayor diligencia, las soluciones adecuadas que permitan el acceso de toda la población, independientemente del municipio en el que residan a una sanidad pública, universal, gratuita y de calidad”.
Entienden, además, que el problema derivado de esta falta de sustituciones y política de acumulaciones laborales es “la consecuente falta de continuidad asistencial que condiciona el hecho de que los pacientes nunca saben que profesional los va a atender, destruyéndose en este caso la tan necesaria confianza en la relación médico-paciente y aumentando considerablemente la dificultad del desarrollo de la práctica clínica de los profesionales que no solo tienen que realizar el doble de trabajo en la misma jornada laboral sino que tienen que interpretar pruebas diagnósticas que ellos no han solicitado, tratar pacientes a los cuales no conocen… con el riesgo que esto conlleva y aumentando la posibilidad de cometer errores”.
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