Por otro lado, la gama de establecimientos de restauración han concluido con unos índices de facturación notables. Los restaurantes de la ciudad de Soria han atendido la gran demanda de las tradicionales comidas de grupo celebradas por amigos o familiares en cotas paralelas en 2012 si bien cada vez se hace más patente la tendencia de los clientes a rebajar el gasto dedicado a comidas tomadas tanto en barra como en mesa. En cualquier caso, los hosteleros destacan el esfuerzo económico del cliente para poder ser fiel a esta costumbre sacrificando otros gastos domésticos.
En líneas generales y con divergencias en función de su localización, bares y similares son la división sobre la que ha hecho una mella mayor la contención del gasto por cliente. Este hecho se ha puesto de manifiesto con el consumo extendido de bebidas como el vino y la cerveza en detrimento de los combinados alcohólicos.
Al mismo tiempo, este sector también se ha visto perjudicado por una caída en la afluencia de consumidores. De esta manera, mientras las pasadas jornadas de viernes y sábados los bares sorianos trabajaron a un elevado ritmo gracias a la llegada de los turistas y visitantes del fin de semana, el resto de los días este ritmo menguó de forma visible.
Entre otros factores, ASOHTUR atribuye este descenso de la clientela a la subida del número de residentes en Soria que este año ha aprovechado las fiestas de San Juan para disfrutar de unos días de vacaciones en otros destinos.
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