El alcalde de Béjar, Alejo Riñones Rico, junto con las concejalas de Educación y Museos, Inmaculada Martín Rico, y Cultura, Purificación Pozo, realizaron la tradicional ofrenda floral en la tumba del escultor bejarano Mateo Hernández que coincide en esta ocasión con el 65 aniversario de su muerte.
Tras depositar el ramo de flores en su tumba, Riñones procedió a la lectura de una carta que el escultor Severiano Grande dedicó a Hernández. En ella le recuerda que llorar ante una escultura acabada ?es privilegio solo de unos pocos?. ?Tú lo sabes muy bien Mateo, nosotros sabemos la ansiedad que se siente al terminar una obra, lo que cada bloque esconde y que sólo nosotros a fuerza de golpes, con rabia a veces, pero siempre con el respeto que la materia nos exige para no herir ni la forma ni el personaje que intentamos realizar?, explica Grande.
Grande recordó en la misiva los ratos ?sentado en un cajón en torno a tu escultura, cabilas, enmudeces, asimilas todo lo bueno que en el arte ha habido [?] porque tú y yo sabemos penetrar en el alma de los bloque y dialogar con ellos?.
La emotiva carta finaliza pidiendo al recordado escultor bejarano que descanse ?porque tu huella jamás se borrará de este planeta?.
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