La sociedad salmantina cree que ?es una pena? que se cierren tantos negocios, aunque a ninguno se le escapa cuáles son los motivos. Obviamente, la crisis ha afectado, y siempre lo hace en mayor medida a los más pequeños, que no tienen tanta capacidad de pérdidas como las grandes superficies.
Sin embargo, el precio que deben pagar por mantener el negocio, sobre todo si está en una zona céntrica, las pocas ayudas que tienen en comparación con otros negocios más grandes y los hábitos de la gente, cada vez más apegados a la comodidad que otorga el tenerlo todo al alcance de una tarde, son una parte que no se puede dejar de tener en cuenta en esta proliferación de negocios cerrados.
Lo que todos consideran un hecho es precisamente que cada vez son más los locales que se ven vacíos. En cada paseo, se dan cuenta de uno nuevo. Esto no es algo propio solo de Salamanca sino que se puede ver en toda España, como aseguran varios de los encuestados, que aseguran que el trato familiar y la calidad de los productos del pequeño negocio sí es mejor que la que puede haber en centros comerciales o supermercados.
Por el contrario y sin embargo, la mayoría de los entrevistados afirman que en muchas ocasiones son ellos los que optan por la comodidad que otorgan los grandes centros comerciales, aunque también los hay que afirman comprar siempre en los pequeños negocios.
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