El fallecido se encontraba en Villahierro desde el pasado 24 de mayo, cuando el juez le condenó tras confesar que había asfixiado a su pareja durante una discusión en el domicilio de su abuela en la localidad leonesa de Lorenzana. Tras matar a su pareja, el joven huyó del lugar en su vehículo pero sufrió un aparatoso accidente de tráfico. Cuando llegaron las asistencias reconoció los hechos y la Policía pudo encontrar el cadáver de Isabel.
Segor L.G. ocupaba un plaza del Protocolo de Prevención de Suicidios de la prisión dado que ya habría intentado quitarse la vida hasta en cuatro ocasiones desde su internamiento, dos de ellas en la enfermería y el resto en la celda. Los hechos por los que fue condenado, el asesinato de Isabel, se remontan al pasado 21 de mayo.
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