El diputado nacional de Equo, Juantxo López de Uralde, que concurrió en las listas de Podemos, junto con el concejal de Villares de Yeltes José Ramón Barrueco y Marta Santos han presentado en la mañana del viernes los nuevos pasos a dar para que la mina de uranio que se pretende abrir en la zona de Retortillo no se lleve a cabo finalmente. En este sentido, José Ramón Barrueco, también perteneciente a la plataforma de Stop Uranio, ha asegurado que la indefinición que rodea a dicha mina está perjudicando a la localidad que representa, sobre todo en el tema de la ganadería y la agricultura, ya que no se están produciendo inversiones por la posible contaminación que pueden producir las explosiones y los gases radón.

El turismo, además, también puede verse lastrado una vez que abra por el periodo estival el balneario de Retortillo la próxima semana. Por ello, el concejal ha pedido que se resuelva cuanto antes una situación que se lleva alargando desde el 2011 y que resolución sea la no apertura de la mina. Sin embargo, la Junta de Castilla y León sigue dando pasos para ello y en su informe de impacto medioambiental aseguró que los residuos no son radiactivos, algo que pone en tela de juicio José Ramón Barrueco. "No hay por dónde cogerlo", dice y opina que la Justicia les acabará dando la razón, como ocurrió con el caso de El Corte Inglés, aunque espera que no esté abierta para entonces.

Este es precisamente uno de los pasos que tienen dados en Equo, un recurso contencioso administrativo ante la Audiencia Nacional para frenar un proyecto que ya la Comisión Europea ha dudado sobre su rentabilidad y riqueza mineral. El diputado nacional Juantxo López, afirmó, asimismo, que se está pendiente por otro lado de una queja europea por el incumplimiento de dos directivas sobre el hábitat y el impacto medioambiental y que se preguntará en el Congreso al ministro competente en la materia sobre otra queja, esta desde Os Verdes de Portugal, en la que se decía estar en desacuerdo con una mina que también les afecta a ellos ya que parte tocaría la frontera. 

Juantxo López de Uralde ha aprovechado la rueda de prensa para hablar sobre las posibles consecuencias del proyecto que plantea el Partido Popular de alargar la vida de las centrales nucleares 60 años más que reabriría la de Garoña, a pesar de los antecedentes que dejó la fusión nuclear de varios reactores en la central de Fukushima hace ya cinco años. Precisamente, esta reapertura sería la que haría necesario el uranio, principal motor de estas centrales, y cuyas minas ya abiertas se encuentran en escasez. "Es posible, necesario y urgente salir de la energía nuclear", aseveró. 

El desastre nuclear ocurrido en Fukushima todavía se siente, incluso con más fuerza, cinco años después de los hechos. En la actualidad sigue sin estar habitable ningún territorio a 30 kilómetros de radio, lo que ha provocado cien mil desplazados. Además, se hace notable el "espectacular" aumento en los cánceres infantiles y las mutaciones en animales y vegetales que provoca, entre otras cosas, que no se pueda pescar en la zona debido a la contaminación marina. El accidente nuclear fue catalogado con un nivel siete, al igual que el que aconteció en Chernóbil en 1986. 

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