Al respecto, UPA-COAG exigen al ministro de Agricultura español y a los gobiernos autonómicos que muestren su oposición a esta propuesta y que trabajen de forma que ningún agricultor y ganadero profesional a título principal sea víctima de recorte alguno en los pagos compensatorios que están percibiendo actualmente.
Por este motivo, el ministro Arias Cañete que tiene la competencia de definir los requisitos que deben reunir los agricultores y ganaderos para ser considerados activos debe mostrarse inflexible en Europa a la hora de exigir que se priorice el máximo nivel de ayudas sin que se aplique ningún recorte económico ni se actúe contra la distribución de derechos de los profesionales.
Finalmente la Alianza por la Unidad del Campo defiende que dentro de la reforma de la PAC quede fortalecida la figura del agricultor y ganadero profesional a título principal en la cadena de valor, con capacidad suficiente para negociar en el seno de las interprofesionales, impidiendo con ello que se suscriban contratos a perdidas con las industrias.
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