El entrenador de Unionistas, Astu, ha comparecido tras la derrota de su equipo este domingo en la sala de prensa del Helmático. El míster ha comenzado analizando el partido pero a medida que iba avanzando su discurso se ha ido calentando al valorar la actitud de Ramón Calderé, el técinco del Salmantino con el que ha tenido sus más y sus menos durante el choque.
“Ha sido un derbi. Un partido bonito, con tensión, y en el que todas las personas de los clubes se han comportado, salvo una. El entrenador no se ha comportado. Le he dado la bienvenida pero me ha estado increpando todo el partido. Por haber sido futbolista le han perdido mucho pero hoy aquí se ha pasado mucho, conmigo y con el línea”, ha valorado Astu.
Además, se ha acordado del cesado María Hernández. “El Salmantino ha perdido mucho con el cambio de entrenador. Este tipo de personas en el fútbol no deben de estar, ni en Salamanca. La palabra es 'personaje', han perdido mucho con respecto al caballero que tenían antes. Insultos desde el primero momento y cuando le han expulsado ha seguido. Quiero dar la enhorabuena a todo el Salmantino y a su afición, menos al entrenador”, ha explicado.
Eso sí, lo primero que ha hecho Astu ha sido dar la enhorabuena al rival por los tres puntos. De igual manera, ha considerado que Unionistas ha sido mejor en lo futbolístico. “El fútbol no ha sido justo con el juego del equipo. En la primera parte hemos perdido demasiados balones por dentro y hemos sufrido en las contras. Después hemos sido infinitamente superiores ante un rival que se ha encerrado. En la segunda parte se ha jugado poco. Rodri ha hecho dos paradas maravillosas. Ello con ocasión y media nos han hecho un gol. Hemos intentado hacer dos contra uno a los laterales pero hasta la segunda parte no lo hemos interpretado bien. Después, el desgaste de ellos ha hecho que no pudieran salir a la contra. Lo justo hubiera sido un empate”, ha manifestado.
Astu se ha despedido dando las gracias a su afición y valorando el significado de este derbi. “Gracias a la afición que ha estado increíble, seguimos primeros y vamos a entrenar porque nos ha sacado toda la rabia. “Es cierto que yo no soy salmantino. Llevo poco aquí pero ha sido muy bonito ver a la gente que ha hecho este club pasarlo mal, con lágrimas en los ojos. Ver el estadio, el calentamiento y todo lo que pasaba. Me imagino lo que ha podido ser para los que sois de aquí de Salamanca”, ha concluido.
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