Un grupo de investigadores de Salamanca participan en un proyecto de investigación cuyo objetivo es conocer las causas y el tratamiento del colangiocarcinoma, el cáncer de vías biliares, un tipo de cáncer hepático de los considerados como raros, ya que tiene una baja incidencia y un muy mal diagnóstico, ya que el índice de supervivencia a los cinco años es “prácticamente nulo”, tal y como ha explicado el doctor Jesús Bañales, uno de los responsables de la investigación.
Este proyecto está financiado por la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) y tiene un presupuesto de 300.000 euros en tres años que serán aportados por la Junta Provincial de la asociación en Guipúzcoa.
Este viernes, la presidente de la AECC de Salamanca, Inmaculada Rodríguez, junto a los directores de los cuatro equipos que desarrollan esta investigación, el doctor Jesús Bañales del centro de investigación biomédica de San Sebastián, la doctora Malú Martinez-Chantar del CIC-BioGune de Bilbao, el doctor Matías Ávila del Centro de Investigación Médica Aplicada de Pamplona y el doctor Juan García Marín de la Universidad de Salamanca y del Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca (IBSAL).
Se trata de un proyecto multidisciplinar, tal y como ha explicado Bañales, en el que además de los grupos de trabajo dirigidos por estos cuatro doctores, participan investigadores clínicos y cuya intención es que la investigación consiga financiación para que pueda desarrollarse otros dos años más.
Bañales ha destacado que la incidencia de este tipo de cáncer está aumentando y que no hay terapias efectivas salvo la cirugía y, en este sentido, ha asegurado que esto tampoco es la “panacea” ya que el grado de supervivencia a los cinco años tras la cirugía es del 15%.
“Las causas son multifactoriales”, tal y como ha subrayado el doctor Juan García Marín, quien ha explicado que hay mucho que investigar tanto sobre las causas como en el diagnóstico. Según ha detallado, se suele diagnosticar en pacientes con edad avanzada, en torno a los 70 años aunque cada vez se diagnostica en pacientes más jóvenes. Actualmente, este tipo de tumor es responsable de unas 700.000 muertes al año en el mundo y uno de cada duiez pacientes con cáncer de hígado padece un colangiocarcinoma.
La participación del grupo de investigadores de la USAl y del IBSAL es fundamentalmente farmacológica, tal y como ha señalado el doctor García Marín. Se trata de un equipo de trabajo dedicado al estudio del cáncer hepático y su especialidad es la quimiorresistencia.
Los cuatro grupos de investigación pertenecen al Centro de Investigación Biomédica en Red para el estudio de Enfermedades Hepáticas y Digestivas (CIBEREHD) del Instituto de Salud Carlos III y llevan colaborando más de cinco años en varios proyectos de investigación relacionados con el cáncer hepático.
Cabe señalar, además, que los grupos de San Sebastián y de Salamanca han sido socios fundadores de una red europea para el estudio de este tipo de cáncer hepático, fundado hace tres años y en el que participan 40 centros de 12 países diferentes, por lo que este proyecto cuenta con acceso a muestras de distintos hospitales y con el asesoramiento de expertos internacionales.
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