La paliza recibida por una niña de ocho años por parte de un grupo de chicos en un colegio de Mallorca y el joven almeriense que ya no quiere vivir por el acoso que sufre en su centro escolar han puesto de nuevo sobre la mesa el debate sobre el denominado ?bullying?.
Los datos confirman que el acoso escolar se ha incrementado durante los últimos años. También en la provincia de Salamanca. Según datos de la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León, durante el curso pasado se denunciaron diez casos cada trimestre, cuando el anterior fueron seis de media. De hecho, a mitad de curso ya había más denuncias que en todo el anterior.
También cabe destacar que hay más centros que reseñan incidencias de convivencia en la provincia de Salamanca, pasando del 50% en el curso 2013-2014 a casi el 56% durante el curso pasado. Sobre todo en los centros con menos alumnos, triplicándose el porcentaje.
El alumnado implicado en incidencias y que reincide también aumenta, aunque se trata sólo del 2% del total de escolares. La mayoría son relacionadas con el desarrollo de las tareas (73%), en aumento, mientras que los problemas entre alumnos suben al 18% y entre profesores y alumnos bajan al 3%.
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