El Senado ha aprobado el Proyecto de Ley por el que se modifica la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios , un cambio motivado por la necesidad de la transponer la Directiva Europea de derechos de los consumidores. Para la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) esta nueva norma "supone efectivamente una mejora en la protección de de los consumidores, si bien siguen quedando asuntos pendientes, como los controles de cumplimiento, las sanciones o la garantía".
A su juicio, la nueva norma da un paso más mejoras en la defensa de los consumidores, "pero aun queda mucho por hacer para reforzar efectivamente la protección de los consumidores". Por ejemplo, en la mejora de la acciones colectivas de los consumidores, una regulación de las garantías y mejores procedimientos de reclamación. Para OCU, la nueva ley recoge de forma adecuada los derechos de los consumidores, "pero sobre el papel cojea en su aplicación práctica de los mismos. Habrá que esperar a su entrada en vigor para ver como evolucionan estos aspectos, hasta entonces, no se podrá decir que la Ley efectivamente protege y defiende a los consumidores".
Desde OCU insisten en la necesidad de que se establezcan controles sobre la aplicación de la norma, "pues solo asi se garantiza su cumplimiento". Además, proponen que se profundice en la figura de la sanción con carácter resarcitorio, "es decir, cuando la inspección de consumo sancione a un empresario por incumplir sus obligaciones hacia un consumidor, el importe de esa sanción debería servir como compensación económica del daño sufrido, pues ahora el consumidor se ve obligado a acudir a tribunales".
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