El Centro de Láseres Pulsados (CLPU) celebra hoy y mañana en Salamanca su segunda Reunión de Usuarios, que esta ocasión se centra en la industria española interesada en innovar a través de la tecnología láser. Un centenar de inscritos busca nuevas aplicaciones para la investigación que ya se realiza con el equipamiento actual, aunque en pocos meses llegará el láser de petavatio, uno de los más potentes del mundo. El CLPU expone las posibilidades que ofrecen sus instalaciones y la industria explica sus necesidades, de manera que se va consolidando una comunidad de usuarios y colaboradores.
 
En la actualidad, a falta de contar con el láser de petavatio en el edificio M5 del Parque Científico de la Universidad de Salamanca, ya están funcionando cuatro laboratorios complementarios en el edificio M3 “en los que se desarrollan proyectos industriales”, ha comentado Luis Roso, director del CLPU, en declaraciones a DiCYT (www.dicyt.com). En concreto, el centro ya trabaja con una empresa de fabricación de láseres, otra de aplicaciones médicas de la tecnología láser y con la energética Iberdrola, aunque estas compañías prefieren mantener el secreto sobre estos trabajos.
 
Tras una primera reunión en diciembre de 2011, que tuvo un carácter general, esta vez el foco se pone en la industria. Por una parte, el CLPU muestra sus capacidades y, por otra, los potenciales usuarios le trasladarán sus demandas. “Estamos para escuchar y para hacer prospectiva lo que puede interesarles”, indica Luis Roso. Además de empresas, acuden otras universidades y centros tecnológicos.
 
Después de la reunión del año pasado, “vamos teniendo una comunidad de usuarios que preguntan y que vienen al M3”, asegura el director. Ahora, el reto es sumar a la lista nuevos nombres. “Nos gustaría enfocarnos más a aplicaciones biomédicas”, señala Roso, pero también hay que tener en cuenta el interés de empresas de microtecnología, así como “los servicios auxiliares que ofrecemos, por ejemplo, el microscopio electrónico o el microscopio de fuerza atómica”, que pueden ser utilizados por otros grupos de investigación, en el marco de NUCLEUS, la Plataforma de Apoyo a la Investigación de la Universidad de Salamanca.
 
A pesar de la situación económica, muchas industrias están dispuestas a invertir en I+D, según Roso. “Es el momento de hacer un esfuerzo para abrirse a nuevas tecnologías y posibilidades, para unirnos y racionalizar las cosas, no se trata de hacer lo que nosotros queremos, sino lo que interesa a las empresas y que ellas puedan encontrar sinergias”, asegura.
 
Esta reunión se enmarca dentro de las acciones que el CLPU realiza para impulsar la participación española en el proyecto europeo de luz extrema ELI (Extreme Light Infrastructure) y cuenta con el apoyo de los tres socios del Consorcio del CLPU: la Junta de Castilla y León, el Ministerio de Economía y Competitividad y la Universidad de Salamanca.
 
En la actualidad, el edificio M5 está casi finalizado y el láser de petavatio que albergará y que está siendo construido por una empresa francesa, estará terminado para el verano de 2013. Pasado el verano llegarán las cajas con el láser y comenzará un periodo de instalación de tres o cuatro meses”, indica Luis Roso, poco preocupado por los plazos concretos, ya que “es mejor hacerlo bien y que hacerlo deprisa”.
 
El presupuesto de 2013 se mantiene
 
En la inauguración del encuentro, Ángel de los Ríos, director general de Universidades e Investigación de la Junta de Castilla y León, ha destacado el acercamiento del CLPU al sector industrial, recordando que tradicionalmente la industria española ha tenido un escaso interés por la investigación. Además, ha asegurado que, “tras un pequeño recorte en 2012”, el presupuesto del centro para 2013, unos tres millones de euros, no se verá alterado.
 
Por su parte, Ángela Fernández, subdirectora general adjunta de Planificación de ICTS del Ministerio de Economía y Competitividad, ha recordado que el Centro de Láseres es una de las Instalaciones Científicas y Tecnológicas Singulares (ICTS), infraestructuras diseñadas para investigar “en la frontera del conocimiento” cuyo mapa fue diseñado en 2007, aunque desde entonces sólo cinco de las nuevas han seguido adelante, entre ellas, el CLPU. La representante del Gobierno ha destacado la importancia de crear “una comunidad de usuarios fuerte para que estas infraestructuras sean aprovechas al máximo y así revertir beneficios a la sociedad”.

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