De este modo, en nuestras carreteras se podrá comprobar cómo los alemanes, españoles y belgas son los que más rápidamente pierden los estribos al volante, una realidad que reconocen el 70% de los alemanes –los número uno en “jurar y perjurar”–, el 62% de los españoles y el 61% de los belgas. Por el contrario, los holandeses son los conductores más relajados, ya que solo el 48% se altera ante una situación complicada en la carretera.
Pero no solo hay diferencias entre países, sino también entre sexos. Por ejemplo, en el caso de los turistas alemanes, que son muy fieles a nuestro “sol y playa”, pierden los estribos el 63% de los hombres, frente al 70% de las mujeres. En España, sucede justo al revés: las mujeres se consideran más prudentes y optan por una conducción lenta en el 53% de los casos, frente al 42% confesado por los hombres, según constata el estudio realizado recientemente por el Observatorio Español de Conductores (Ducit).
Este Observatorio también corrobora el carácter imprudente de los españoles al volante, ya que señala que el 67,9% de los españoles no respeta los límites de velocidad en carretera, mientras que el 51% no cumple con la obligatoria distancia de seguridad. Además, aunque la autopercepción de los conductores españoles es muy buena, ya que el 98% se considera “bueno o muy bueno” al volante, la cosa cambia cuando se trata de hablar sobre los hábitos del resto: el 50,5% considera que se respeta “poco o nada” a los demás conductores.
Los alemanes, los más rápidos; los italianos, los menos respetuosos
Precisamente por esta percepción no tan positiva del resto de conductores, el 75% de los españoles, junto con un porcentaje idéntico de italianos, belgas y holandeses, es favorable a fijar límites de velocidad para reducir los accidentes, un argumento que solo comparte el 20% de los alemanes. De hecho, Alemania es el único país en el que sus conductores son contrarios a establecer límites. Al 32% le gusta conducir rápido, pero si se encuentra con un turista alemán al volante, no hay de qué preocuparse, ya que en general son, junto con los suizos, los conductores más respetuosos y previsores de toda Europa.
Con quien hay que tener más cuidado es con los italianos, ya que reconocen ser los más adictos a utilizar el móvil mientras conducen, un hábito frecuente entre el 34% de los encuestados y que se ha convertido en una rutina diaria para el 6% de los italianos. Este hábito es una de las diferentes distracciones que están detrás del 40% de los accidentes de tráfico. Al menos, tal y como recoge el estudio realizado por la consultora AutoScout24, los italianos reconocen que no son conductores respetuosos, por lo que su autopercepción coincide con la realidad, algo que no sucede entre los conductores de otras nacionalidades, incluidos los españoles.
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