Desde que comenzó su andadura, Ganemos Salamanca marcó el control ciudadano de los cargos públicos como una prioridad. En esa línea, la agrupación de electores ha aprobado un código de obligado cumplimiento para sus integrantes que, entre otras cuestiones, se compromete a rendir cuentas de sus actividades, mediante instrumentos presenciales y virtuales, asamblearios, democráticos y abiertos. La información se presentará en un formato de datos abiertos, que permita acceder a ella con facilidad.
Todas las personas que participen en la candidatura se comprometen también a facilitar todos sus ingresos, bienes y rendimientos patrimoniales, así como todos aquellos datos necesarios para la detección de posibles conflictos de intereses y la elaboración de auditorías ciudadanas. Este compromiso se extenderá a los 3 años siguientes al final de su mandato.
Ganemos también acepta la revocación de sus cargos por mala gestión o incumplimiento flagrante y no justificado del programa electoral. Durante un plazo de 5 años, los cargos públicos de la agrupación no podrán acceder a cargos de responsabilidad en empresas creadas, reguladas, supervisadas, ni aquellas que hayan sido beneficiarias de un contrato municipal.
La candidatura también se compromete a renunciar de forma explícita a créditos bancarios y donaciones que puedan coartar su independencia política y a introducir sanciones efectivas en casos de financiación irregular.
Además, la agrupación renuncia a financiar su campaña a través de fundaciones o entidades jurídicas cuyos recursos y mecanismos sean poco transparentes o cuyos objetivos sean diferentes a los de la candidatura.
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