La Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (ANGED) considera que los dieciséis domingos y festivos de apertura comercial decididos por la Junta de Castilla y León suponen "una drástica reducción respecto a la libertad de aperturas para todo el año que solicitaban el municipio de Salamanca y otros municipios de la provincia de Valladolid".
ANGED asegura que desde el principio ha defendido la liberalización total de horarios en aquellos municipios que iniciaron los trámites para declarar zonas de gran afluencia turística: Valladolid, Arroyo de la Encomienda, Salamanca, Santa Marta de Tormes y Carbajosa de la Sagrada. "Con la decisión finalmente adoptada, se pierde una oportunidad de impulsar la oferta comercial de estas ciudades, en detrimento de los consumidores", añade en un comunicado.
En opinión de las grandes superficies, si sus empresas quieren abrir los festivos es porque hay clientes que están dispuestos a comprar. "Estas restricciones limitan de manera injustificada la libertad de empresarios y consumidores en una sociedad moderna y avanzada". Por eso, ANGED no entiende que se pueda comprar un producto en internet a cualquier hora del día o de la semana y no se permita hacerlo en un comercio establecido.
Y es que, continúa, el sector del comercio sigue siendo la única actividad de servicios que no puede decidir libremente sus horarios de atención al cliente. "Estas restricciones, además de injustificadas y discriminatorias, impiden generar nuevas oportunidades de negocio, dinamizar las ventas y crear nuevos empleos. Sobre todo, en aquellas ciudades turísticas donde miles de visitantes llegan los fines de semana y no pueden comprar porque encuentran todas las persianas del comercio bajadas. Esto no ocurre con los bares, restaurantes, hoteles, transporte y resto de empresas de ocio que sí pueden aprovechar el tirón turístico de las ciudades de Castilla y León", concluye.
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