La muerte de un joven de 32 años después de una noche de excesos durante una despedida de soltero procedente de San Sebastián reabrió hace dos semanas el debate sobre la venta de alcohol durante las noches de fiesta en Salamanca. La división hostelera vuelve a ser palpable y un grupo de empresarios ha presentado una queja formal ante la Junta de Castilla y León para denunciar que Salamanca se está convirtiendo en un destino turístico asociado a los excesos en la ingestión de alcohol y drogas. Tras lo acontecido el último fin de semana, con múltiples altercados, la división es mayor.
Desde la Asociación de Empresarios de Hostelería de Salamanca se muestran en contra de las despedidas de soltero tal y como se están organizando, dando una imagen de la ciudad como destino para consumir grandes cantidades del alcohol de forma sencilla y barata. Pero hay hosteleros que ven un ingreso fácil y cuantioso al acoger a estas despedidas, al igual que los hoteles o pensiones donde se alojan.
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