La inflación anual estimada del Índice de Precio al Consumo (IPC) en mayo es del 0,2%, de acuerdo con el indicador adelantado elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este indicador proporciona un avance que, en caso de confirmarse, supondría una disminución de dos décimas en su tasa anual, ya que en el mes de abril esta variación fue del 0,4%. En este comportamiento destaca la bajada de los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas, frente a la subida registrada en 2013.
Para María José Landaburu, secretaria general de Uatae, “se trata de un dato que mantiene los precios en los valores mínimos iniciados en julio y que se intensificaron en septiembre, y que se corresponde con una economía con perfil bajo. Es esto lo preocupante, que los valores mínimos de los precios sean consecuencia de una demanda reducida”. Para Landaburu, “esta situación de los precios tiene lógica económica ya que nos encontramos en una situación donde nuestra economía está con poco tono, con pérdidas de empleo y con fuertes debilidades y caídas de las ventas en muchos sectores consecuencia de la menor capacidad adquisitiva de las rentas de la mayoría de los españoles”.
A su juicio, “todo indica que este nivel mínimo de los precios, al borde de la deflación, se va a mantener durante los próximos meses del año ya que no son previsibles tensiones inflacionistas consecuencia del bajo perfil económico y la insuficiente demanda interna”. Landaburu lamenta que “este nivel de precios que coquetea con la deflación ni tan siquiera está sirviendo para mejorar nuestra competitividad en Europa vía menores precios, ya que al ser una situación generalizada en la UE el diferencial con los precios medios europeos es mínimo”.
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