Salamanca se encuentra entre las diez provincias que más población pierden en la última década. Junto con León, Zamora y Palencia, la capital está entre los cinco municipios mayores de diez mil habitantes que más población ha perdido en una década y a Béjar entre los quince más despoblados porcentualmente. Unas cifras que vienen marcadas por la fuerte emigración, pero también por un crecimiento vegetativo negativo, que continuará durante la próxima década, según las estimaciones de población del Instituto Nacional de Estadística. 

Durante los próximos años habrá menos nacimientos, a un ritmo progresivo que hará que en 2021 haya menos de dos mil nacimientos por año en la provincia de Salamanca por primera vez en su historia. Mientras las mujeres nacidas en 1900 tuvieron una media de 3,4 hijos y las nacidas en 1965 tuvieron 1,6 hijos, la previsión es que el número final de la generación de nacidas en 1975 seguirá siendo muy bajo, con 1,4 hijos.

 

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