El cierre de locales comerciales tiene su mejor representación en el paseo de Canalejas. Esta vía, puntera en otros momentos, está viviendo una etapa complicada a nivel comercial. De los 127 locales que tiene el paseo, 27 permanecen cerrados, lo que supone un 21 por ciento del total.
 
A medida que un viandante camina desde el Parque de la Alamedilla hacia el río Tormes puede percibir a simple vista la multitud de carteles de venta y alquiler que se alojan en los escaparates de los negocios que fueron en el pasado. “Comercialmente hablando Canalejas está muerto”, apunta un salmantino de 53 años que regentó una librería hasta que la crisis se la llevó por delante. Una empresa de maquinaria agrícola y otra de seguridad y protección laboral son dos ejemplos de emigración hacia el Polígono de los Villares. Además, si preocupante es el paseo en sí, más aún lo son las calles colindantes, puesto que alguna de ellas tiene la mayoría de sus locales desocupados. 
 
En una situación muy similar se encuentra la calle Pozo Amarillo. 13 de sus 35 locales tienen echado el cierre y sólo uno tiene anunciado su inminente apertura. A su favor están las obras de peatonalización de la calle, que tienen como objetivo fomentar el comercio de la zona. Por su parte, Gran Vía cuenta con 23 locales desocupados por 13 de la calle Zamora, 6 de la avenida de Mirat, 5 de la calle Toro, 4 de la Rúa Mayor y 3 de la calle Azafranal.

Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios

Lo más leído