Gracias a la organización y coordinación de los profesores Francisco Villanueva y José María Martín Honorato, los alumnos extranjeros realizaron múltiples actividades lúdicas, desde conocer Salamanca visitando la Catedral y las torres de la Clerecía, pasando por viajar a Madrid, hasta visitar Vitigudino, localidad de la provincia, donde pudieron fabricar su propio queso.
Según los profesores que han coordinado el intercambio “el principal objetivo del proyecto es el conseguir que nuestros alumnos se abran a la idea de Europa como lugar común de trabajo y estudio. Es necesario que observen cómo se estudia su materia profesional en otro país, y que analicen las perspectivas de colocación que tienen sus colegas alemanes en una profesión similar a la que ellos han elegido”.
Los intercambios de estudiantes con Alemania se producen desde el año 2000. Este curso, ya hubo una visita de alumnos salmantinos del primer y segundo curso de bachillerato, así como de los ciclos formativos del instituto Venancio Blanco al centro alemán Berufliche Schule en septiembre. Entre otras actividades pudieron conocer Hamburgo y visitar una cervecería en Flensburg. También asistieron como oyentes a las clases de sus compañeros alemanes.
Desde el día 15 de octubre los estudiantes germanos han convivido con familias españolas que se han ocupado de enseñarles algunas costumbres propias y algún que otro lugar de la provincia salmantina y alrededores como así comentaba Inés, una chica a la que su familia de acogida invitó a ir a Sevilla. Sorprendidos por la ciudad, su fiesta y por el trato amable de los salmantinos, el viernes 26, ponen rumbo a sus casa en Elmshorn.
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