Gracias a las donaciones y también a las adquisiciones que se realicen, el Centro Documental de la Memoria Histórica proyecta contar con 30 kilómetros lineales de documentos para convertirse en un centro de referencia. "Se trata de un proyecto de tremenda magnitud", afirmaron los responsables en la visita privada realizada hoy. En 2006 habia 3,4 kilómetros, actualmente más de 6, y así se pretende ir ampliando hasta los 30 kilómetros.

Para la inaguración del día 18 se realizaran varias adquisiciones. La primera de ellas serán obras de la biblioteca de Rafael Abella que se depositarán en el nuevo edificio, además de documentos de masonería en el exilio que serán enviados en 31 cajas gracias a un contrato con la Gran Logia de España.

"El centro nace con espacio para más fondos, porque esto tiene que ir creciendo", aseguró el director general de Bellas Artes, Miguel Ángel Recio, en la visita al centro respecto a posibles problemas de espacio.

Plan de impulso 

El Patronato del Centro Documental de la Memoria Histórica aprobaba el pasado verano un plan de impulso proyectado desde el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte para incrementar y potenciar los fondos de este archivo ubicado en Salamanca.

Con este plan el centro pasa de tener 6,2 a 30 kilómetros lineales de documentos, por lo que multiplica por cinco sus fondos documentales, a través del depósito de archivos relevantes como el del Movimiento Nacional y la Organización Sindical, dos de las instituciones más representativas y activas del régimen franquista entre 1938 y 1977; del archivo histórico del Partido Comunista Español (PCE); de políticos destacados en la Transición, como Antonio Fontán, Joaquín Garrigues Walker o Alfonso Osorio, cuyos archivos han sido beneficiarios de ayudas a proyectos archivísticos concedidas por el Ministerio; y de colecciones y fondos de las fundaciones Primero de Mayo, Largo Caballero y Pablo Iglesias, entre otros, que como en el caso anterior han sido beneficiarios de ayudas.

El Centro Documental dela Memoria Histórica será un centro de referencia a nivel internacional no sólo por su magnitud, sino por ser muy escasos los centros documentales integrales de estas características en otros países de nuestro ámbito, en los que se recojan y estudien de forma conjunta el registro de los conflictos políticos, militares y los cambios sociales del siglo XX con los documentos oficiales, no oficiales y clandestinos, públicos y privados, colectivos e individuales.

 

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