Comienza uno de los juicios más mediáticos del año que sentará en el banquillo a Montserrat González, su hija Triana Martínez y la policía local Raquel Gago, acusadas de acabar con la vida de la que fuera presidenta de la Diputación de León y del PP provincial, Isabel Carrasco, el 12 de mayo de 2014.
El juicio oral comienza el 18 de enero y se realizará por el procedimiento de jurado popular. Los hechos justiciables que se imputan a estas tres mujeres pueden ser constitutivos de un delito de asesinato con alevosía en concurso con un delito de atentado y un delito de tenencia ilícita de armas.
Para cubrir el juicio, que está previsto que se prolongue durante casi un mes, hasta el 17 de febrero, están acreditados más de cien periodistas de más de 30 medios de comunicación locales, regionales y nacionales, tanto de prensa escrita como digital, agencias informativas, de radio y televisión.
Desde el cierre de la instrucción comenzó a conformarse el jurado popular que determinará el grado de implicación de Montserrat González, Triana Martínez y Raquel Gago. Tanto la Fiscalía como las acusaciones particulares han solicitado una pena de 23 años de prisión para cada una de las tres acusadas.
Montserrat González y su hija permanecen ingresadas en la cárcel, mientras que Raquel Gago recobró la libertad el pasado 29 de enero después de que la Audiencia Provincial así lo decretase bajo fianza de 10.000 euros.
?Animadversión? a la víctima
La culpaban de perjudicar a Triana. La homicida actuó por odio, porque era "un demonio" que había destrozado la vida de su hija.
Según el magistrado que ha elaborado los hechos justiciables, la muerte de Isabel Carrasco se produjo por la "animadversión" que las acusadas Montserrat y su hija Triana sentían hacia ella, a la que culpaban de utilizar su posición como presidenta de la Diputación Provincial de León y del PP de León para perjudicar a Triana cuando trabajó en la Diputación y reclamarle después diferencias salariales por dicho trabajo, así como en sus aspiraciones profesionales y políticas.
"Me vi en la obligación de hacerlo por todo lo que estaba haciendo a mi hija", señaló Montserrat, que en su declaración explica ante el juez que cometió el crimen a plena luz del día y con evidentes riesgos de ser descubierta porque "estaba harta y no podía más".
Los disparos y el arma
Montserrat efectuó a Isabel cuatro disparos de los que tres la alcanzaron.
El primero en la espalda afectando al ventrículo izquierdo del corazón, y después, para rematarla y tras agacharse sobre Isabel que había caído al suelo, otro en la mejilla izquierda y el último en la parte posterior de la cabeza.
Las heridas le causaron lesiones que determinaron su muerte casi inmediata por shock hipovolémico.
El arma utilizada en el crimen es un revólver Taurus calibre 32 H&R Magnum, con su número de serie punzonado.
Salud mental de las acusadas. Informes psiquiátricos
Trastorno de ideas delirantes de tipo persecutorio. Es la principal conclusión del informe psiquiátrico elaborado sobre Montserrat, la autora confesa de los disparos que acabaron con la vida de Isabel Carrasco.
El informe psiquiátrico de Triana refleja que no censura abiertamente la conducta de su madre «por imposición patológica, dentro de una relación de dependencia de base afectiva y de motivación inconsciente». Es por eso que, pese a su inteligencia, Triana no es capaz de realizar un solo reproche moral a su madre.
En registro autorizado judicialmente que se efectuó sobre las 0.29 horas del día 13 de mayo de 2.014, en el domicilio de Triana, se encontró también una pistola semiautomática marca "Royal", sin número de serie visible, recamarada para cartuchos del calibre 7,65x17 milímetros, en condiciones de funcionamiento.
Más información en ileon.com
http://ileon.com/actualidad/058630/anatomia-de-un-crimen-las-claves-del-juicio-por-el-asesinato-de-la-politica-leonesa-mas-poderosa-de-su-historia
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