En ese momento y de forma inesperada, la reclusa se ha revuelto contra ellas y, a la vez que las insultaba, las ha propinado golpes en la cara y en el pecho, dejándolas además lesiones en la muñeca.
La agresión se produjo en la mañana de martes y las dos funcionarias han sido trasladadas al servicio de Urgencias del Hospital Nuestra Señora de Sonsoles con numerosas contusiones, según el sindicato CSIF.
La reclusa pertenece al módulo amarillo, donde se encuentran las internas de primer grado, que es donde se encuentran las de mayor peligrosidad y que tienen derecho a dos horas de patio por la mañana y otras dos por la tarde.
Ha sido cuando iba a salir al patio por la mañana cuando ha ocurrido el hecho. En ese momento, las funcionarias han avisado por walkie-talkie a compañeras de otro módulo, que han acudido en su ayuda para reducir a la agresora.
El sindicato CSIF achaca este tipo de agresiones a la "impunidad" de los presos con necesidad de tratamiento psiquiátrico, que suponen el 45 por ciento de los reclusos en España, cifra que ha aumentado por el creciente consumo de drogas sintéticas. A esto añaden que sólo hay dos psiquiátricos penitenciarios en el país y la reducción de personal en los centros penitenciarios que ha dejado la falta de oposiciones en los últimos años, con una plantilla cuya edad media es de 53 años.
Desde la central sindical se advierte que, según los datos de la Dirección General de Instituciones Penitenciarias, la cárcel de Brieva es la segunda con más porcentaje de agresiones a los funcionarios. La cárcel cuenta en la actualidad con 115 reclusas.
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