?No será un partido fácil?, aseguraba Aris Marcos en la previa. Y no lo fue. Sobre todo, por la tensión que se respiraba en el Francisco Mateos. Pero el Ciudad Rodrigo ganó al colista Becerril por la mínima y sale del descenso.
Los mirobrigenses todavía corren riesgo de caer de forma directa a Regional. Para ello, tendrán que perder en casa del Cristo Atlético y que el Mirandés B gane su partido. Pero también pueden evitar el posible arrastre del Atlético Astorga. Esto lo conseguirá si es capaz de vencer al Cristo Atlético en tierras palentinas.
Desde el inicio, el Ciudad Rodrigo fue a por el partido y tuvo innumerables ocasiones para hacer gol en la primera mitad. Sin embargo, la falta de puntería de los atacantes mirobrigenses y las paradas del meta visitante mantuvieron la igualada a cero hasta el descanso.
Sin embargo, a los pocos minutos de la vuelta del vestuario, el Francisco Mateos encontró el éxtasis. Alberto roba un balón en tres cuartos, encara al defensa y, tras regatearle, aloja el balón en el fondo de la red.
En los últimos minutos, los locales desaprovecharon varias ocasiones de gol más. Lo corto del resultado hacia que el duelo tuviese mucha presión y Melero era el más peligroso de los visitantes. Pero, tras el pitido final, la alegría se desató en Miróbriga. La salvación está cerca; queda la batalla final.
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