Los charros quisieron rendir ante su afición, pero pagaron y mucho el hecho de encajar un parcial importante en contra en los minutos finales de la primera mitad. No acabaron de engrasar la maquinaria los de Fran Tejado en el segundo acto y prueba de ello es que el equipo visitante fue madurando y aumentando la ventaja en el electrónico.
El duelo acabó 25-32 y dejando claro que el bloque salmantino tiene mucho trabajo todavía por delante.
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