Importante fue el encuentro para el Guijuelo desde los primeros compases, esto hizo posible que tras solo cuatro minutos del comienzo del partido, Raúl Ruiz pusiera el uno a cero en el marcador tras una falta cerca del área pitada sobre Pino. No sabía la que se le venía encima el Izarra, que pudo crear alguna ocasión.
La tuvo Manu Dimas en el minuto 18 con intensidad de los locales, presión que terminó con el gol de Pino, poniendo el dos a cero y el partido muy de cara para los chacineros. La llegada más peligrosa del Izarra estuvo en las botas de Briñol que fue incapaz de finalizar su llegada al área local. A solo cuatro minutos del final de la primera parte, Aitor Aspas puso el tres a cero en el marcador, dejando prácticamente sentenciado el partido antes del descanso.
Tras solo dos minutos después de la reanudación del partido, Raúl Ruiz marcó un verdadero golazo de falta poniendo el cuatro cero, el Izarra sin presencia en el campo contrario en este tramo del encuentro. Un minuto después, solo uno terminó por completar la mano para los chacineros con el cinco a cero, el encargado de hacer este quinto gol fue Pino, desatando la locura en las gradas del Municipal.
Pero esto no iba a terminar así, en el 53 Manu Dimas marcó el sexto para un arrollador Guijuelo que no ponía fin a la fiesta en este Jueves Santo. Dos minutos después, el conjunto visitante no podía creerse que llegaría el séptimo gol, de nuevo Pino, hat-trick del jugador chacinero.
El Izarra logró marcar en el 71 el gol del honor pero que de nada le sirvió. Y cuando todo parecía tranquilo y en reposo, con el siete a uno en el marcador, Carmona dejó en ocho a cero en el minuto 90. Victoria histórica la vivida en el Municipal.
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