Jorge Hernández ha venido dejando claro desde el primer momento que de llevarse a cabo la operación no supondrá un coste extra para el Guijuelo, por lo que se negó a acordarla con las condiciones primeras de los tinerfeños, que exigían que los jamoneros se hicieran cargo de los salarios de los dos futbolistas que llegarían prestados.
La suma de esas dos fichas resultaba ser más de los alrededor de 8.000 euros que hasta final de campaña los chacineros deben pagar a Ochoa, por lo que sólo si el Tenerife abona el resto podría llegarse a un acuerdo definitivo en la operación.
Ochoa, que llegó del Valladolid B, tiene contrato con el Guijuelo hasta el día 30 de junio, pero la entidad verdiblanca puede de manera unilateral renovarlo. El club no quiere cortarle la progresión al centrocampista, aunque siempre que su marcha no suponga un gasto extraordinario a las ya maltrechas arcas del club chacinero.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios