El judo cesa su actividad durante los meses de verano pero el Judo Club Doryoku sigue realizando actividades para los niños de los gimnasios Zarza y Yoko Gake y también para sus alumnos de los centros escolares. Esta temporada han querido desmarcarse con tres campamentos destinados a edades diferentes y con actividades adaptadas a las mismas.
Del 25 de junio al 2 de julio organizaron el turno de los más pequeños en Aldeadávila, con la participación de un total de 100 niños de entre 6 y 12 años que realizaron actividades tan diversas como: Judo, multideporte, gymkhanas, rastreos culturales, talleres de manualidades, piscina, marchas de senderismo, taller de cocina o veladas nocturnas. Y todo ello haciendo hincapié en los valores del deporte como el respeto, compañerismo o solidaridad. El último día se realizó una convivencia y una comida con los padres de todos los judokas en la playa del Rocoso y después de catorce ediciones la experiencia sigue siendo un completo éxito.
Por cuarto año consecutivo, Penamacor es el destino elegido por los organizadores para celebrar el campamento de las categorías infantil y cadete (entre 12 y 17 años). Este lugar ofrece un sinfín de posibilidades a la hora de poder realizar actividades deportivas y de multiaventura en un ambiente seguro y versátil. Una vez más los clubes Doryoku (Salamanca) y Stabia (Mérida) aunaban fuerzas para organizar uno de los stages de verano más especiales y diferentes de los que se realizan actualmente en la península (del 5 al 14 de julio).
Este año han sido un total de 67 participantes y es que es la temporada con mayor afluencia. Además este año, los organizadores sorprendieron a todos los judokas con una excursión a la playa de Nazaré y con actividades de multiaventura organizas allí mismo. Aún queda un turno más en Saucelle para un grupo de edad intermedio, de entre 9 y 12 años.
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