En 2015, Inglaterra y Gales acogían el Campeonato del Mundo de rugby. Entonces, varios exjugadores del llamado Club Deportivo Universitario (CDU), Agrupación Deportiva Universidad de Salamanca (ADUS) y Club Deportivo Universidad de Salamanca (CDUS), popularmente conocido como ADUS, acudían a presenciar algunos encuentros y lanzaban un desafío: repetir la experiencia cuatro años después en Japón.
Y es que este país asiático acoge del 20 de septiembre al 2 de noviembre el Mundial de este deporte que están disfrutando seis antiguos integrantes del equipo salmantino, tres de ellos charros, uno de Alicante, otro de Corella (Navarra) y uno más de Madrid: Senén Alvaredo, Raúl Álvarez, César Bernabéu, Antonio Librada, Ángel Oliva y Carlos Torres Yuste.
“Uno ya había estado trabajando aquí dos semanas, por lo que, aunque estuviera a gran distancia, aumentó nuestras ganas de venir”, cuenta Carlos Torres Yuste, natural de esta ciudad, a SALAMANCA24HORAS.
“Las entradas se consiguen por sorteo. Nos tocaron seis y aquí estamos otros tantos. Dos vinieron una semana antes y los otros cuatro nos incorporamos el 20 de septiembre tras 15 horas de viaje y un transbordo en Roma. Los otros dos charros regresan a España este sábado y otro amigo vuelve el lunes, pero otros dos exjugadores y yo nos quedaremos hasta el 5 de octubre”, añade.
La intención con la que acudían a Japón era disfrutar de algún partido de España. Sin embargo, la selección quedaba eliminada en la fase de clasificación: “Habíamos mirado posibles encuentros de nuestro combinado. Si se hubiera clasificado, se habría enfrentado a Japón en el choque inaugural. Fue un chasco lo que pasó en el duelo que podía haberle clasificado. Nunca pensé que ocurriría un robo así”.
Ante tal situación, esta expedición de integrantes del también denominado Universidad de Salamanca, que congrega a jugadores que pasaban por el club entre 2006 y 2016, cambiaba su planificación de encuentros y ya ha acudido al Francia – Argentina y al Irlanda – Escocia. “Fuimos con camisetas del ADUS, pero ante la ausencia de España, hemos comprado las de Japón”, especifica Carlos Torres Yuste.
El único salmantino desde este sábado que está siguiendo el Mundial en Japón destaca el ambiente que se vive en los partidos: “Recomiendan acudir una hora antes para poder entrar sin problemas, pues es un agobio de gente y se avanza a pasos cortos. Los estadios son enormes, se ve bien desde cualquier zona y están repletos. Puedes comprar comida y cerveza en las propias gradas”.
“La experiencia está siendo increíble porque al deporte se añade un viaje con amigos. Los japoneses están afrontando el torneo con mucho entusiasmo y a los europeos nos miran extrañados y nos hacen fotos. Les resultamos gente curiosa. Son muy amables, educados y hospitalarios, a pesar de que se comunican poco en inglés. La vida es bastante cara si la comparamos con España y nos estamos acostumbrando a su comida y cultura”, detalla Torres Yuste.
¿El motivo? Estos chicos están intentando conocer bien el país, por lo que al Mundial de rugby están sumando viajes por Hiroshima, Kawaguchi, Kioto, Matsumoto, Osaka, Shirakawago, Takayama y Tokio. “Salvo el que trabajó aquí, ninguno habíamos venido a esta nación”, comenta el portavoz del grupo.
Él y sus amigos están intentando unificar las tradiciones del rugby con las japonesas. Por eso, realizan su particular tercer tiempo tras los partidos o lugares que visitan: “Por las tardes solemos tomar una cerveza tranquilamente. Un día fuimos a un karaoke al que nos llevó una chica que había estudiado en Salamanca. Fue muy divertido. Había música de Enrique Iglesias, canciones de series para niños y éxitos internacionales. No nos hemos encontrado con ningún otro grupo de españoles, pero sí coincidimos con muchos argentinos”.
En Japón, estos seis amigos se enteraban de que el equipo que les une (ahora designado Club Deportivo Universidad de Salamanca) se quedará sin competir esta temporada. “Se especulaba con ello a comienzos del verano, pero es una pena”, afirma, resignado, Carlos Torres Yuste.
Curiosamente, en el momento más delicado de su historia, estos antiguos jugadores han llevado a la entidad lo más lejos posible: a Japón y a un Campeonato del Mundo… aunque sea a través de su sentimiento y de unas camisetas.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios