El encontrar un sustituto de Balta en la dirección deportiva y el entrenador que lleve las riendas del austero proyecto del Salamanca es el primer objetivo del club, que sabe que no podrá cerrar el presupuesto pronto y que en muchos casos deberá hacerlo dando palos de ciego.
Ahora bien, no hay unanimidad en que siga Zegarra, ya que el Consejo está dividido en relación a si debe llegar un técnico nuevo o por el contrario continuar confiando en el peruano.
En este sentido, los que quieren que siga se apoyan en los números conseguidos en los partidos que estuvo como máximo dirigente, que no fueron malos, mientras que los que apuestan por un cambio creen que el proyecto necesita aires nuevos por completo.
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