Un simple gesto puede marcar la diferencia a la hora de producir un accidente o no. El pasado jueves un ciclista de Burgos resultó herido tras impactar contra la puerta de un vehículo que se abría en ese momento.
Es por ello que el 112 ha compartido una medida que puede ahorrar muchos sobresaltos y sobre todo daños a los ciclistas. Se trata de abrir el coche a la holandesa. Una práctica muy sencilla.
El conductor abrirá su puerta con la mano derecha, la más alejada de la puerta, lo que provocará un mayor giro del cuerpo, lo que ampliará su ángulo de visión. Esto supondrá que antes de abrir la puerta se mirará a la calza, y será entonces cuando se perciba la presencia de ciclistas.
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