La nieve finalmente ha hecho acto de presencia en la noche de este lunes y durante la madrugada de este martes, 21 de enero, en Salamanca.
Pese a que la nevada no ha sido intensa, sí ha generado complicaciones en las primeras horas del día, especialmente en las carreteras, tal y como indica la Dirección General de Tráfico. En la autovía A-62 se han producido al menos dos accidentes, por lo que a las 02:45 horas se ha debido cerrar el carril derecho de circulación en el kilómetro 212,9 en Parada de Rubiales debido a encontrarse un camión cruzado en sentido hacia Salamanca.
También a las 06:27 horas otro accidente ha obligado a hacer lo propio en el kilómetro 224, también sentido Salamanca, en Pedrosilo El Ralo, en la misma autovía.
A las 08:04 horas, la DGT ha informado que el corte en la autovía A-62 es total desde el kilómetro 203 en Parada de Rubiales al kilómetro 219 en Pajares de la Laguna, en dirección Salamanca.
En las alertas del mapa interactivo de la DGT aparece que desde el kilómetro 235 de la A-62 en el término municipal de Moriscos al kilómetro 193 en Parada de Rubiales el tramo es "transitable con precaucación" debido a la nevada, en el término municipal de Moriscos.
Lo mismo ocurre en la autovía A-50 desde el kilómetro 100 en Santa Marta de Tormes hasta el kilómetro 52 en Cantaracillo en ambos sentidos.
Por último, existe el aviso de hielo por meteorología adversa con circulación condicionada en la carretera autonómica CL-510 desde el kilómetro 0 en Salamanca al kilómetro 18 en Alba de Tormes.
En la capital salmantina se ha producido un herido en un accidente registrado en la avenida de la Merced, que conecta la ciudad con la urbanización Las Bizarricas, debido al hielo. En el siniestro, al menos una persona ha resultado herida.
También se ha cortado por la peligrosidad de la zona la carretera entre Villares de la Reina y San Cristóbal de la Cuesta.
Los conductores que decidieron salir desde Villamayor hacia Salamanca por la "carretera trasera", que va a dar a la rotonda del estadio Helmántico, tuvieron que aguantar más de tres cuartos de hora de retención.
Uno de los carriles se encontraba impracticable y era muy peligrosa la circulación en sentido Salamanca, por lo que los conductores pusieron a prueba su paciencia al no poder avanzar en la carretera.
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