El salón de actos de la Hospedería Fonseca ha acogido durante la tarde de este miércoles una mesa redonda enmarcada en el V Ciclo de Justicia El Norte de Castilla, titulada 'La modernización de los juzgados de Castilla y León, a debate'. Durante la misma, el auditoria ha podido escuchar las ponencias de José Ramón González Clavijo, presidente de la Audiencia Provincial de Salamanca, y de Carmen Herrero Alonso, psicóloga social y profesora de la Universidad de Salamanca.
El máximo responsable de la Audiencia Provincial de la capital del Tormes ha hecho un análisis sobre el grado de la eficiencia del sistema judicial en la comunidad para encontrar nuevas pautas que lo modernicen y sea posible alcanzar una justicia más eficaz y adaptada al siglo XXI.
“Es importante tener leyes adecuadas y un menor número leyes, unos procesos con mayor poder de decisión del juez, más sencillos y más rápidos pero sin faltar a las garantías, una mayor formación de los jueces, así como un mayor conocimiento de otras ciencias por parte de los operadores jurídicos, revisar el número de letrados, el código deontológico, y valorar la atención a la Carta de Derechos del Ciudadano” ha enumerado José Ramón González Clavijo.
La profesora Carmen Herrero Alonso, por su parte, experta en psicología social y docente en la Universidad de Salamanca, ha expuesto un enfoque cercano a la psicología jurídica, lejos de diagnósticos o evaluaciones psicológicas “La modernización es un punto de conexión perfecto entre la psicología jurídica y el derecho, de manera que es necesario hacer hincapié en algunas de las facetas que probablemente se han tenido menos en cuenta o están menos presentes en este proceso, a pesar de estar explícitamente contemplada en la Carta de Derechos de los Ciudadanos. Y es que detrás de las normas, de las leyes y su cumplimiento, están las personas”, ha considerado.
Asimismo, la profesora Herrero ha planteado tres ideas fundamentales. “En primer lugar, es necesario plantearnos qué les preocupa a los ciudadanos cuando acuden a la justicia y qué es lo que quieren. La percepción de ser injustamente tratado tiene unas consecuencias grandísimas, incluso para la legitimación de las instituciones. Es fundamental conocer alguno de esos elementos porque se derivan de ellos pautas muy concretas y muy fáciles de aplicar que podrían mejorar esa confianza tan pequeña que muchas veces nos dan las encuestas”, ha valorado.
La segunda de las ideas que ha expuesto, ligada a la primera, tiene que ver con la necesidad de que en los tribunales entre el conocimiento científico y las prácticas basadas en la evidencia. “Obviamente, es muy complejo el trabajo de los operadores jurídicos y no pueden saber de todo. Pero el peligro está en que cuando hablamos de comportamiento humano, se estén utilizando criterios que no se ajustan a los conocimientos científicos que aporta la psicología jurídica, sino que se está actuando desde el punto de vista del sentido común como cualquier otro ciudadano, aplicando pseudocuencia, mitos y conocimientos no científicos”, lamenta.
El tercer punto es relativo a la formación, aunque aclara que no se refiere a cuestiones jurídicas. “Esos se les suponen, y además las cifras de especialización de nuestros profesionales es excelente”, apunta. Se refiere a otro tipo de conocimientos, que en su opinión resultan fundamentales. “En este sentido es muy importante la apuesta de la Universidad de Salamanca por el trabajo en conjunto de las facultades de Psicología y Derecho, que desarrollan desde hace más de tres años. Estamos trabajando en asuntos de mente y Derecho y muchas de esas actividades han dado lugar a que se introduzca, por primera vez y como algo muy novedoso en el mapa de titulaciones nacional e incluso internacional, una asignatura de Psicología y Derecho en el Grado de Derecho, cuando los alumnos están ya en cuarto curso”, ha celebrado.
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