Descubriendo la ciudad: qué ver en Salamanca

Salamanca ofrece mil destinos y posibilidades tanto a turistas como a locales. SALAMANCA24HORAS hace un recorrido por los lugares más emblemáticos de la ciudad, aquellos que tienen una visita obligada para, por qué no, redescubrirlos y pasar una agradable jornada en la capital

 Catedral
Catedral

Ciudad histórica, curiosa, bella, acogedora, infinita. Salamanca apila decenas de adjetivos que describen la magia que han albergado sus calles desde siglos atrás. Personajes ilustres han hecho protagonista a la capital del Tormes de sus andanzas, como Miguel de Unamuno, Fray Luis de León, Santa Teresa de Jesús o Cristóbal Colón. También ha sido el escenario de otras tantas obras literarias, véanse ?La Celestina? de Fernando de Rojas, ?El Lazarillo de Tormes? o ?El licenciado Vidriera? de Miguel de Cervantes.

La que fue declarada en 1988 como Patrimonio de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas y Capital Europea de la Cultura en 2002 atesora entre sus emblemas la Plaza Mayor, una visita obligada para todo aquel que pise la ciudad, más aún por la noche, cuando sus fachadas se iluminan ofreciendo un panorama inigualable.

Si continuamos el paseo, conoceremos la Rúa, una de las calles principales, con la Casa de las Conchas y la Clerecía, que ofrece una de las propuestas museísticas más importantes con la subida a sus torres, denominada ?Scala Coeli?. Llegaremos a la Plaza de Anaya, que alberga el Palacio de Anaya, la actual facultad de Filología. Es además el enclave de la catedral nueva, una joya arquitectónica famosa por los adornos del astronauta o el dragón con el helado de tres bolas. La catedral vieja, por su parte, permite la entrada a la visita de ?Ieronimus? por las torres medievales, que ofrecen una mirada inédita de la ciudad.

Fachada usal

Llega el turno de conocer la Universidad de Salamanca y su fachada rica ubicada en la calle Libreros, una de las vías más universitarias de Salamanca. Es obligada la búsqueda de la rana, así como el paseo por las aulas en las que impartían clase Fray Luis de León o Miguel de Unamuno. Desde el Patio de Escuelas podremos acceder a un espacio mucho más íntimo, el Patio de Escuelas Mayores y el Cielo de Salamanca, una pintura abovedada con representaciones de astrología y astronomía.

Si salimos del aura universitaria, podemos continuar el paseo por la calle Compañía, que conserva su original trazo irregular adornado con piedra de Villamayor, y que es especialmente bello desde su parte baja. Esta calle deja entrever algunos de los edificios más emblemáticos de la ciudad, como las anteriormente mencionadas Casa de las Conchas y la Clerecía, o la iglesia de San Benito, los conventos de la Madre de Dios y de las Agustinas y el Palacio Monterrey. Este último, propiedad de la Casa Ducal de Alba, es una reciente incorporación a la propuesta museística de la ciudad.

Calle companía

No podemos olvidarnos de otros espacios de merecida visita, como la Cueva de Salamanca y su leyenda de Satanás y magia negra; el Cerro de San Vicente, con los estratos arqueológicos que sitúan en ese punto el nacimiento de la ciudad; el Pozo de Nieve, unas misteriosas galerías subterráneas; o el Huerto de Calixto y Melibea con su monumento a la Celestina.

Si volvemos a la Salamanca actual, podemos dirigirnos hacia el Barrio del Oeste y conocer su Galería Urbana, más de un centenar de obras pictóricas que adornan las puertas de los garajes de la zona y suponen todo un museo callejero.

El apartado gastronómico es clave en cualquier destino, para ello no podemos dejar de recorrer las calles de la zona Van Dyck, donde podremos degustar pinchos y tapas de algunos de los platos estrella de Salamanca: jamón ibérico de Guijuelo, embutido, carne de morucha, farinato, hornazo, chanfaina o patatas meneás (o revolconas), todo ello regado con un vino de las Arribes, que presume de etiqueta con Denominación de Origen.

Plaza mayor

Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios

Lo más leído