Lleva el verano y el buen tiempo y con él se llenan las terrazas de cervezas y pinchos, algo muy sano desde el punto de vista social pero no tanto del de la salud. Y menos aún si lo que se sigue buscando es adelgazar para llegar bien al verano.
Sin embargo, no todas las tapas y pinchos pueden ser igual de perjudiciales para el objetivo. Obviamente, se debe huir de las salsas o los fritos, mientras que el pan, en exceso, tampoco es recomendable.
Ante ello, el Instituto Médico Europeo de la Obesidad ha elaborado una lista de tapas que se pueden consumir sin miedo a engordar.
Entre ellas, el pescado es el plato estrella. Así, el salpicón de marisco, por ejemplo, apenas contiene grasa y calorías aunque el marisco sea bueno para saciar el apetito. En esta lista también se encuentran los mejillones al vapor, con poca grasa y nutrientes suficientes para el organismo.
Los boquerones en vinagre y el pulpo a la gallega también son una buena opción para una tapa. El primero es, además, muy común en los bares y aporta mucho contenido de proteínas y minerales que mantienen el colesterol en ratios bajos. El pulpo, por su parte, también es saludable, aunque más calórico debido al aceite de oliva.
Dejando los pescados, las típicas banderillas también pueden ser un pincho sin remordimiento, así como las tapas de aceitunas. Y para los carnívoros, una tosta de jamón al año no hace daño. El jamón tiene un alto valor nutricional con propiedades similares al aceite de oliva. Sus grasas son, en mayoría, buenas y si a ello se le suma un poco de tomate, nutricionalmente la tapa se convierte en una gran opción.
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