Vendedores y salmantinos ya tenían ganas de que El Rastro volviera a La Aldehuela. Después de ser suspendido temporalmente por varios positivos relacionados en el entorno de varios vendedores, los puestos han vuelto a Salamanca.
Ni el frío, ni la amenaza de lluvia ha frenado a cientos de salmantinos que desde primera hora de la mañana se han acercado para visitar El Rastro de la Nueva Normalidad.
Cabe recordar que la Policía Local controla un aforo que tendrá como máximo 800 personas y que deberá cumplir todas las normas de seguridad sanitaria.
Para ese control del aforo, la Policía Local ha vuelto a acotar la zona con un vallado donde se diferencia la salida y la entrada de los visitantes que ha tenido que usar la mascarilla obligatoria.
Igualmente, se ha tenido que garantizar las medidas de desinfección de los productos probados o devueltos y los probadores se han higienizado de forma frecuente, preferentemente tras cada uso.
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