A la vez que el ritmo de la vida va a acelerando también los hacen los precios, motivo por el que muchos conductores se decantan más por los coches de segunda mano, en vez de estrenar uno nuevo.
Según datos proporcionados por la propia DGT, la edad media de los automóviles españoles se sitúa en los 13 años, una de las cifras más altas de toda la Unión Europea.
Es justamente esta cifra la que ha hecho pronunciarse al director de la DGT, Pere Navarro quien se ha mostrado preocupado ante el envejecimiento de nuestros vehículos.
Por lo que se ve parece ser que a la DGT no le interesa la compraventa de coches viejos, motivo por el que según señala el propio Pere Navarro "nos interesa renovar para evitar la compraventa de vehículos. No puede ser que haya transferencias y compraventas de vehículos de gran antigüedad".
De hecho, quien se decante por comprar un coche viejo tiene que saber que al final lo barato le va a terminar saliendo caro, puesto que son muchas las restricciones que afectan de lleno a estos vehículos.
Por ejemplo, algún Ayuntamiento nuevo se suma cada semana a la restricción del tráfico por sus vías céntricas, dirigido a aquellos vehículos más antiguos. Esto ocurre ya en las grandes ciudades como Madrid o Barcelona, pero también en otras más pequeñas como Valladolid, a tan solo 121km de Salamanca, 1 hora en coche.
También que tener en cuenta que los vehículos más antiguos contaminan mucho más y eso es algo que no nos interesa puesto que todos debemos contribuir a la mejora del medio ambiente para asegurarnos a nosotros mismos una mejor calidad de vida.
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