Como ya informó este medio, el alcalde de Béjar, Alejo Riñones, tenía programada una reunión con el gerente provincial de salud para tratar los temas sanitarios que afectan a Béjar. Esto, en un marco de incertidumbre sembrada en la ciudadanía por la posible eliminación de nuevas unidades y servicios del hospital, e incluso, el cierre del mismo.
Así pues, se hizo efectiva el pasado viernes. En la misma, el gerente provincial de salud negó el desmantelamiento del centro hospitalario bejarano. De este modo, junto con el primer edil, revisó las diferentes especialidades que allí se practicaban y aseguró lo siguiente: “el servicio de especialidades en Béjar no peligra, que no se va a cerrar el hospital ni las urgencias y que el servicio de extracción de sangre seguirá realizándose en Béjar”.
Alejo Riñones, por su parte, manifestó la propuesta de creación de la figura de un coordinador de sanidad para la propia ciudad de Béjar. El objetivo, “controlar el buen desarrollo de las consultas y mejorar la comunicación entre usuarios y el Hospital Virgen del Castañar”.
En el aire, todavía, la situación en relación a los puestos de trabajo del suprimido servicio de laboratorio. Ante esto, señaló “que aún no han sido resueltos por la Junta de Castilla y León pero se lo volveré a plantear al Consejo de Salud en la reunión del próximo 4 de marzo en Valladolid”.
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