Tanto los cientos de vecinos que acompañaban la procesión como los porteadores de la imagen corrieron a refugiarse a la carpa festiva nada más salir del templo con la esperanza de que la tormenta amainara. Aunque caía con menos fuerza, la lluvía no llegó a cesar del todo por lo que tras casi media hora de espera y ante las caras de decepción y el llanto de algunas personas, no quedó más remedio que acortar el recorrido procesional, deslucido por la obligación de tapar la imagen del Cristo con un plástico para evitar ser dañada por el agua.
La banda de música salmantina de ‘La Expiración’ amenizó el recorrido al que numerosos vecinos asistieron también desde los balcones de sus casas. El regreso al templo volvió a dejar escenas de emoción, sobre todo durante la interpretación del himno de España en los instantes previos al retorno de la imagen al templo.
El acto estrella de la tarde será, si el tiempo no lo estropea, la novillada sin picadores que permitirá ver a partir de las 6 de la tarde sobre la arena de la Plaza de Toros a Antonio Hernández, Fran Colmenero y Yannis ‘El Adoureño’ frente a seis ejemplares de la ganadería de Adelaida Rodríguez.
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