Aunque el Lunes de Aguas es una fiesta local, la provincia de Salamanca se suma un año más a esta tradición por lo que, si el tiempo acompaña, montes, parques y praderas de todos los rincones se poblarán de vecinos dispuestos a pasar la tarde compartiendo el tradicional hornazo. Así sucederá, por ejemplo, en Guijuelo donde el Parque de La Dehesa se convertirá en punto de encuentro. El Ayuntamiento ha previsto, además, una serie de actividades de ocio para el disfrute de mayores y pequeños.

En otras localidades, el Lunes de Aguas es sinónimo de arraigo a celebraciones locales con multitud de devotos. Así sucederá, por ejemplo, en Vega de Tirados, donde se le rendirá tributo al Cristo de las Aguas con un acto litúrgico y una procesión para recordar la leyenda que asegura que la imagen que se venera apareció en las aguas del río Tormes.

En Alaraz el protagonismo será este Lunes de Aguas para el Cristo del Monte. Allí, tras la tradicional misa tiene lugar una romería en la que la imagen del hijo de Dios sale en peregrinación a hombros desde la ermita hasta el pueblo, un camino que dista unos cuatro kilómetros y que es recorrido entre bailes y cantos al son de las populares charradas.

La devoción mariana la encontramos en Buenamadre y Linares de Riofrío. En el municipio del Campo Charro sigue fiel a una tradición, la de la Virgen de los Remedios, que se remonta a cuando los vecinos acudían de Buenamadre y alrededores hasta la ermita en romería llevando sus pendones, insignias y estandartes para ofrecerlos en la cuesta del santuario. Mientras, en Linares veneran a la Virgen del Suceso y, para ello, las mujeres visten el traje serrano para la celebración. Ya en la ermita se celebra la santa misa concelebrada por varios sacerdotes de la zona y cantada por el coro parroquial. Terminada la Eucaristía comienza la procesión en torno a la ermita, concluyendo con el baile regional de tejer el cordón y las jotas charras y serranas.

Finalmente, las tradiciones del Lunes de Aguas tienen también su referente en La Alberca donde todo el pueblo se vuelva con la celebración del popular Día del Trago, una vieja celebración (data de 1547) que rememora la ayuda de las albercanas en la guerra contra las tropas portuguesas. El Ducado de Alba tuvo un gesto de magnanimidad con el pueblo al permitirle cobrar una tasa a municipios cercanos.

Sacras o paganas, el caso es que la provincia también tiene mucho que celebrar en el lunes más especial del año.

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