Las ventas se destinan en su totalidad a PYFANO, la asociación de Padres, Familiares y amigos de Niños Oncológicos. Los artículos son muy diversos: han contribuido varios establecimientos de Santa Marta de Tormes de todo tipo, desde floristerías hasta una ferretería. También han aportado su granito de arena comercios del Tormes, como Imaginarium. Pero también la gente de a pie se ha acercado a donar ropa y otras cosas.
Los residentes de Ballesol , por su parte, han puesto su esfuerzo en esta iniciativa solidaria, fabricando ellos mismos productos para su posterior donación al rastrillo, como fofuchas, pulseras y trabajos con mimbre. Aunque lo importante, ha indicado la animadora sociocultural, es que todos trabajen para algo. "Lo bonito es la ilusión, que trabajan para algo; ése es el estímulo".
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