La Fundación Hospital General de la Santísima Trinidad ha obtenido la autorización de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León para la realización de este tipo de intervenciones. “Al obtener dicha autorización, ampliamos nuestra oferta de servicios para poder ofrecer una mejor atención a nuestros pacientes”, señala la directora médica de la Fundación, la Dra. Mariví Montero. El primer trasplante fue realizado el pasado mes de diciembre por el doctor Ernesto Alonso Juárez.
El trasplante de córnea (queratoplastia) es una intervención quirúrgica en la que se sustituye el tejido de la córnea que está dañado o enfermo por el tejido sano de la córnea de un donante.
Según explica el Dr. Alonso, con esta intervención se busca mejorar la visión de una persona con una córnea dañada, aliviar los dolores en el ojo producidos por la enfermedad, mejorar la función estética, etc.
En la actualidad, la técnica del trasplante de córnea ha evolucionado mucho, tanto, que se puede trasplantar solo algunas capas de la córnea enferma. El cirujano es quien decidirá qué procedimiento utilizar, ya que existen distintas técnicas de queratoplastia. Desde la penetrante, en la que se trasplantan todas las capas de la córnea, a las lamelares, en las que trasplantan solo algunas capas.
Dentro de las lamelares, destacan la DMEK o trasplante de endotelio, en el que se implanta solamente el endotelio donante, una vez retirado el endotelio receptor patológico y la DALK o queratoplastia lamelar anterior profunda, en la que se retiran todas las capas de la córnea receptora menos el endotelio y se trasplanta la córnea donante a la que hemos retirado el endotelio.
Esta intervención está indicada en pacientes que presentan patologías corneales que supongan opacidad o deformidad de la misma. La indicación más frecuente en nuestro medio es el queratocono, en el cual se produce una deformidad secundaria al adelgazamiento de la córnea, seguido por la queratopatía herpética o traumas oculares. También está indicada en edemas corneales crónicos, distrofia endotedial de Fuchs y otras patologías menos frecuentes.
La cirugía se realiza normalmente con anestesia local y no requiere ingreso hospitalario, salvo que las condiciones del paciente lo impidan, por lo que éste puede volver a su casa el mismo día de la intervención.
Resultados
En general, el resultado visual suele ser bastante bueno, pero dependerá de la transparencia del tejido y del astigmatismo resultante. Una vez que se da el alta definitiva, aproximadamente al año de la cirugía, se gradúa la vista al paciente o se procede a realizar cirugías complementarias para eliminar el defecto refractivo. Además, se realizará un seguimiento anual con revisión oftalmológica completa, que incluye un recuento endotelial de la córnea donante.
Aunque el porcentaje de casos no es muy elevado, la complicación más frecuente es el rechazo al tejido implantado, pero depende de la patología y de la técnica quirúrgica utilizada.
Según el Dr. Alonso, “que el Hospital General de Santísima Trinidad haya obtenido la autorización sanitaria para este tipo de intervenciones, supone un importante avance para la oftalmología salmantina, ya que amplía las posibilidades de realizar estas cirugías en nuestra ciudad”.