Un hombre de 58 años, J.F.M., se enfrenta a seis meses de cárcel y tres años de retirada del permiso de conducir tras ser detenido el pasado mes de diciembre por un delito contra la seguridad del tráfico. Efectivos de la Guardia Civil de la Comandancia de Burgos lo arrestaron en Ribera del Duero por superar los límites de velocidad establecidos el pasado 12 de diciembre, cuando a la altura de Villar de Peralonso un Citroën C5 en régimen de alquiler era detectado por el radar de uno de los vehículos de la Agrupación de Tráfico, circulando a 166 kilómetros por hora por la travesía, estando limitada la velocidad a 50 kilómetros por hora.
Entonces fue imposible su detención, pero posteriormente fue localizado y detenido su conductor en la provincia burgalesa. Conforme a la legislación vigente, el superar en 80 kilómetros por hora la velocidad establecida en vía interurbana o en 60 kilómetros por hora en vía urbana constituye un delito. Se da circunstancia de que anteriormente había tenido dos suspensiones temporales del permiso de conducción por otras causas. Sin embargo, durante el juicio el acusado negó los hechos al afirmar que se encontraba en la oficina y no era él quien conducía.
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