La redada antidroga del pasado fin de semana en el barrio del Carmen de Salamanca se ha saldado también con la incautación de objetos que permiten a la Guardia Civil esclarecer otros delitos. Así, una de las escopetas intervenidas corresponde a un robo de armas artesanales que se llevó a cabo hace un año, en octubre de 2012, en una finca de la Sierra de Quilamas.
Cazadores holandeses llegaron a ofrecer una recompensa de 10.000 euros para poder recuperar dos escopetas robadas en una finca de Aldenueva de la Sierra, una zona donde suelen acudir cazadores adinerados a exclusivas cacerías. De hecho, a esta finca ha acudido en algunas ocasiones el Rey Juan Carlos. Entonces desaparecieron catorce escopetas, valoradas en 200.000 euros en total, pues algunos ejemplares tienen un coste de 50.000 euros al tratarse de piezas únicas artesanales.
Una de las catorce escopetas fue recuperada por la Guardia Civil el pasado 24 de enero durante la detención de Raúl 'El Niño' en Valladolid por su presunta autoría en el tiroteo a un joven en un concesionario de coches del polígono Los Villares. El arma con la que opuso resistencia a su asalto, encañonando a los agentes, fue precisamente una de esas escopetas robadas.
Al conocerse que se había recuperado una de las armas, algunos de los cazadores a quienes robaron las escopetas, procedentes de Holanda, se pusieron en contacto con la Guardia Civil para comunicar que ofrecían 10.000 euros de recompensa a quienes entreguen las armas o facilitaran información que permitiera su recuperación.
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