Hasta 307.626 turistas extranjeros llegaron a la provincia de Salamanca durante 2018 según los datos acumulados que el Instituto Nacional de Estadística ha publicado este miércoles en su Encuesta de Ocupación Hotelera.
De esta manera, se consolida este tipo de turismo que ha crecido en más de 100.000 en solo diez años y se sitúa por segunda vez consecutiva por encima de los 300.000 turistas.
Pese a ello, eso sí, se rompe la tendencia alcista de visitantes de otros países después de crecimientos constantes desde que en 2012 llegaron a la provincia 215.553. Desde entonces, las subidas han sido continuas hasta 2017 hasta que en los últimos datos conocidos se pierden cerca de mil.
Esto supone una pérdida de representatividad importante ya que pese al descenso del número de extranjeros que visitaron Salamanca, los viajeros sí crecieron en total en casi 15.000 personas, todas ellas españolas. Pese a ello, entre el número total de turistas, más de un 30% siguen siendo extranjeros.
El éxito entre los más alejados de España, además, se traduce en una crecida extremadamente importante en los últimos diez años. De hecho, en 2009, el número de turistas extranjeros que llegaron a la provincia apenas suponían 184.229 personas. Diez años más tarde, el número ha crecido en más de 120.000.
Las pernoctaciones sí aumentan
El descenso en el número de viajeros entre el colectivo extranjero, sin embargo, no ha provocado que el número de pernoctaciones descienda.
Así, aunque los turistas se hayan casi estancado entre los que proceden de fuera de las fronteras españolas, parece que el turismo sí hace mella en ellos y prefieren dormir en la provincia para seguir visitándola.
No en vano, en 2018, el número de pernoctaciones fue de 474.730, casi 18.000 más que un año antes cuando el número de turistas fue mayor en mil. Esto provoca que, aunque el peso de los extranjeros en el turismo sea inferior al 33%, las pernoctaciones sí suponen una crecida hasta el 37%.
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